Piedrazos
Héctor
Narváez
Si
pensábamos que los integrantes de “la Cuarta Transformación de México” iban a
guardar compostura y que no se adelantarían a los tiempos, como es la vieja
costumbre de la política y de la mafia del poder, pues nos hemos equivocado.
Hasta
el momento a nivel nacional hay dos grupos que ya empiezan a definirse y que
buscarán pelear la candidatura a la Presidencia de la República de aquí a 6
años, y eso que ni bien se ha instalado Andrés Manuel López Obrador en Palacio
Nacional.
Pero,
parece que el jefe máximo también ya trae su propio juego y tiene a su
favorito, o favorita. Es más, hasta podría adelantarme que, como al estilo del
PRI, guardará a “su tapado”.
Monreal
Vs. Sheinbaum
Los
dos adversarios de la pasada contienda interna para la candidatura a Jefe de
Gobierno de la Ciudad de México, de nuevo se enfrentan.
Y
cada quien, ejerciendo su liderazgo y su poder desde su trinchera: El primero,
como líder de los Senadores de Morena, y la dama como “mandamás” de la capital
del país.
Ambos,
no han ocultado desde que tomaron posesión de sus cargos, sus intenciones de
querer buscar ser el posible sucesor de AMLO en la Presidencia de México.
Por
su lado, Ricardo Monreal asegura que se ha ganado ese mérito, al haberse
disciplinado en el proceso del año pasado. Y por eso, hace labor de
convencimiento con los senadores de su bancada, y de otros partidos, como del
Verde Ecologista, para que se sumen a él.
En
contraparte, Claudia Sheinbaum, como Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, y
“consentida” del Presidente, les dice a sus allegados que lo que sigue es
buscar la candidatura hacia Palacio Nacional en el 2024.
De
hecho, es muy evidente que López Obrador tiene como a su favorita a Sheinbaum,
lo cual pone en desventaja a Monreal.
A
estas alturas, el mandatario nacional ya se habrá dado cuenta que los dos
representantes de su partido, buscarán la candidatura dentro de 6 años. Y eso,
en lugar de incomodarlo, pues pareciera que lo está aprovechando para su
beneficio político.
No
dudo que tanto a Monreal como a Sheinbaum les da “calorcito”, y hasta los anima
a que le echen ganas para trabajar en su proyecto en el 2024, pero también AMLO
sabe que se puede dar un “encontronazo” que al final podría afectar a Morena.
De
ser así, esperaría el momento para sacar a su tercer posible y quien sería
realmente “su bendecido”, el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo
Ebrard.
En
la política mexicana, quién no sabe que Marcelo es “su carnal” del Presidente,
desde que fue Jefe de Gobierno de la Ciudad de México. Y muestra de ello, es
que Ebrard lo apoyó en su campaña y en reciprocidad hoy se encuentra en el
Gobierno Federal y a un paso de llegar a “la silla grande”.
Los
chiapanecos, en el juego
En
estos dos bandos que se están abriendo, hay varios de “la aldea” que también se
empiezan a mover.
El
primero fue ERA, que está muy de cerca de Monreal y que opera a favor del líder
de los Senadores de Morena.
Después,
se sumó a este grupo, por conveniencia, el ex Gobernador y ahora Senador
plurinominal del Verde Ecologista, Manuel Velasco. Por conveniencia, porque lo
ayudó a regresar como “gober” provisional a Chiapas y los favores en política,
con favores se pagan.
Aunque
“El Güero” no está del todo convencido con Ricardo, sobre todo con aquella
jugada que están haciendo los hijos de López Obrador, de buscar armar el
partido “Más por México” y con lo cual intentarán “desbancar” al Verde
Ecologista. Pero, por el momento ahí está.
También
se habla que otro chiapaneco que estaría en el equipo de Monreal, sería Noé
Castañón, luego de que el líder de “los morenos” en la Cámara Alta del Congreso
de la Unión logró que tomara protesta como Senador. Y esa factura, también se
tiene que pagar.
Así
que ERA, “El Güero” y “Noecito”, serían parte del grupo político a favor del
zacatecano. Pero, estos chiapanecos, pueden más adelante dividirse, porque cada
uno trae sus propias aspiraciones políticas para el 2024.
Mientras,
que Sheinbaum en Chiapas tiene a ni más ni menos que a Rutilio Escandón dentro
de su equipo. Y Cadenas, como buen conocedor de la política de López Obrador,
sabe muy bien que la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México es ahora “la
consentida”.
Es
más, Rutilio -como lo ha venido haciendo desde que el tabasqueño empezó su
búsqueda por la Presidencia-- se va a disciplinar a lo que diga “el máximo
líder” en su debido tiempo.
Si
es Sheinbaum o Ebrard, eso no le preocupa. Porque seguirá en el juego político
para dentro de 6 años.
Porque
también sabe, como lo saben los militantes de Morena, que Monreal sigue
representando a esa vieja política del país, inmersa en la corrupción y en los
acuerdos contra el pueblo. Y precisamente, los que han “saqueado a Chiapas”,
están de ese lado.
Pero,
también hay que señalarlo: Nada está escrito en la muy anticipada carrera para
elegir el sucesor de AMLO.
Moraleja:
No por mucho madrugar, amanece más temprano.
Piedritas:
¡De verás que anda mal Gurria!
Eso
que mandara a los inspectores de Servicios Públicos y con la Policía Municipal
a desalojar y detener a un pobre vendedor de aguas frescas, si que está grave.
Aunque me dicen que ya castigó a los funcionarios --que no me consta, porque
ese proceso no se ha hecho público--, queda claro que el alcalde de Tapachula
si tiene “mano dura” con la gente humilde, pero “le tiemblan las piernas” para
enfrentar a los delincuentes que están azotando esta ciudad.
Por
último: ¡Ciro no sabe qué hacer!
“La
joyita” de líder de Morena en Chiapas, está en “aprietos”. Resulta que los
reclamos de la militancia se presentan a la orden del día. Porque mientras no
ha visto como acomodar a la gente que hizo campaña --que es lógico que deban
ser contemplados, porque fueron los que trabajaron en el proceso electoral-- su
gente sí, su familia, está bien acomodada en diferentes cargos. Por eso, Ciro
Sales no quiere convocar a reuniones estatales, aunque lo traen “corto-corto”
los consejeros y hasta puede ser que lo destituyan.
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