-
Proponen que el peritaje sea realizado por el Grupo Argentino de Antropología
Forense
La
Sociedad de Alumnos “Dr. Belisario Domínguez” de la Escuela Normal Rural
Mactumactzá exige una investigación con sustento científico, imparcial y
apegado a derecho que determine la causa del deceso del alumno de nuevo
ingreso, José Luis Hernández Espinosa.
En
una aclaración pública por esos hechos recientes del 20 de julio, solicitan también
a los padres del fallecido que permitan la exhumación del cuerpo, para que se
practique la necropsia de ley.
Detallan
en el documento lanzado a la opinión pública, explican que la necropsia de ley
no fue practicada en su momento por la Fiscalía General del Estado, la misma
que sugirió a los alumnos no hacer público los hechos en el momento del deceso
para no entorpecer las investigaciones y por respeto a la familia, por
considerarlo no necesario debido a que los médicos que atendieron desde la noche
del 19 a José Luis Hernández indicaron que el deceso había sido por causas
naturales.
En
el caso que la familia permita la necropsia de ley, la Sociedad de Alumnos pide
que sea realizada por médicos legistas independientes que garanticen que el
resultado sea confiable. Proponen que el peritaje sea realizado por el Grupo
Argentino de Antropología Forense.
Asimismo,
exigen la libertad inmediata del director Conrado de Jesús Borraz León, quien
fue detenido sin una orden de aprehensión, violando así sus derechos humanos.
Niegan
rotundamente que en la normal Mactumactzá se someta a los alumnos a malos
tratos, trabajos forzados o degradantes, mucho menos acciones ihnumanas. Por el
contrario nuestra escuela vive en condiciones de fraternidad y muchas de
nuestras actividades están destinadas a consolidar el espíritu de solidaridad y
conciencia social, con ellas adquirimos los conocimientos necesarios que nos
encamina al servicio del pueblo, aseveran.
Detallan
que José Luis Hernández Espinosa, al igual que todos los de nuevo ingreso llegó
a la escuela y fue recibido a las 12 del día 18 de junio, junto con sus padres,
con quienes tuvieron una plática ese mismo día. Participó después en la reunión
de alumnos de nuevo ingreso y se fueron a dormir.
El
19 continuaron las tareas del día, que incluyeron tres horas de trabajo
agropecuario de seis a nueve de la mañana, después desayuno, rincón de lectura,
limpieza de la escuela, comida, descanso, actividades deportivas por la tarde,
ensayo de taller por la noche, aseo personal, cena y dormir. A eso de las 9:30
de la noche empezó a sentirse mal, por lo que lo llevaron al Sanatorio Peredes,
donde más tarde los médicos dijeron que estaba estable, pero el 20 de julio a
las 20:10 horas se les avisó que había fallecido. ASICh
Comentarios
Publicar un comentario